El debido proceso a los presos polìticos

Escribe: Garabombo

El pueblo peruano ha sido testigo del juicio que el Estado le ha realizado a Vladimiro Montesinos Torres (VMT) el ex jefe del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN) y doble agente, que compró a casi todos los políticos, militares, artistas, seudointelectuales, periodistas, hasta ex futbolistas, bailarinas, etc, quienes se arrodillaban ante los fajos de dólares, que les alcanzaba el cómplice de Fujimori.

Este acto judicial-reality show, era transmitido en directo, por canales de señal abierta y de cable, incluso el canal estatal le dio su espacio, “con los honores que merece” la investidura de asesino y traidor a la patria de VMT. Así es, vimos desfilar a algunos de los involucrados en los negociados donde se regalaba el país a empresas extranjeras, se acordaba como hundir -mediante la prensa chicha- a algunas personalidades, como jugar con la miseria de los peruanos, como dictar la línea editorial a los medios de comunicación, -sobre todo a los canales de televisión- entre otros maquiavélicos acuerdos.

Observamos a generales “arrepentidos”, empresarios con alzenheimer, los vestidos provocadores de la ex amante de VMT; Jackeline Beltrán, periodistas dignos y serviles. Ahí está la cuestión del asunto, el juicio era visto, escuchado y analizado por cualquiera. Imaginemos un proceso judicial en la época del fujimorismo, sobre todo a los presos políticos, mejor dicho, recordemos,- todo era diferente- los procesos con jueces encapuchados, sin derecho a abogado, muchos de ellos -seguramente- ni siquiera se realizaron, sólo tuvieron lugar en la imaginación dictatorial y en el decreto de los esbirros montesinistas.

El cinco de noviembre del 2004 debió iniciarse el juicio a los líderes del Partido Comunista del Perú-Sendero Luminoso PCP-SL (Denominación utilizada por el Servicio de Inteligencia Nacional y la Comisión de la Verdad y Reconciliación). Ellos empezaron a vociferar lemas partidarios, aprovechando la presencia de la prensa en la Base Naval, que los persuadió, y esto, lo vimos todos en televisión, con movimientos de las manos o tocando el vidrio que los separaba de la sala. Primero fue Guzman, luego sus acompañantes, poniéndose de pie, levantaron el puño derecho y golpeaban el aire haciendo un movimiento de fuerza, al mismo tiempo, gritaban consignas en favor de sus intereses y seguidores.

Esto fue lo que nos hizo retroceder a las mazmorras fujimoristas de encapuchados impartiendo justicia. El juicio a los inculpados del PCP-SL se suspendió y se inició hace unos días, el proceso a los acusados por terrorismo del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA). Con limitaciones para la prensa, y la entrega de un video editado por las autoridades penales, marcaron el proceso.
Democracia debería ser, entonces, en los procesos judiciales, un acto en donde las autoridades del Estado, desarrollen con equidad, las posibilidades, para que las personas llevadas a juicio, tengan todos los derechos que le son inherentes, y todos los peruanos puedan ser testigos de estos, mediante los medios de comunicación.

Sino pareciese, que no se midiera con la misma vara a todos ¿Porque a Montesinos sí se le transmite en vivo y a los otros no? ¿Que esconden? ¿Alguna artimaña? ¿Será tal ves porque nuestros actuales gobernantes son unos aprendíces de Montesinos en cuanto a corrupción? ¿Y por eso, quieren dejar como precedente eso, de que, a los subversivos hay que cortarles la democracia mediática y a VMT no, pues él pertenece a esa clase política que se pudre por todos lados en nuestro país?. Queda esa pregunta para la “democracia” toledista. Y la exigencia de un debido proceso a los presos políticos.